DESPACHOS EN 24/48 HRS (RM)

ENVÍOS GRATIS SOBRE COMPRAS $150.000 (RM)

DESPACHAMOS A TODO CHILE

Compost casero: ¡Aprende hacer el tuyo!

3 minutos de lectura

compost-casero
Al momento de pensar cómo hacer compost casero, primero se deben considerar los tiempos de descomposición de ciertos residuos que puedes utilizar.

Esto ya que no todos los residuos toman el mismo tiempo de descomposición, algunas son rápidas, lentas o muy lentas. Incluso, algunas que se deben usar en muy pocas ocasiones.

Por eso en Beeco, te queremos ayudar a que puedas crear y tener tu propio compost casero, y así puedas ayudar al planeta desde tu hogar.

Tipos de descomposición de productos para compost


Descomposición rápida

• Hojas verdes

• Restos de poda de césped

• Maleza verde

• Estiércol

 

Descomposición lenta

• Flores secas o plantas en maceta

• Restos de posta de setos

• Plantas secas

• Paja o heno

• Pieles restos de frutas y verduras

 

Descomposición muy lenta

• Virutas de madera

• Restos de poda o desbroces de ramas o setos leñosos

• Cáscaras de frutos secos y huevo

• Huesos de fruta

• Flores

Además de los tiempos de descomposición te entregamos recomendaciones de los residuos que se deben utilizar poco o que simplemente NO se deben usar.

Deben usarse poco

• Cenizas de leña

• Cartones o derivados del papel

 

No deben usarse

• Cenizas de carbón

• Revistas o impresiones a color

• Aceite

• Filtros de cigarros

• Carne de ningún tipo

Si bien la lista de residuos es aún más larga, estos son los que más generan confusión y algunas personas los utilizan para hacer compost de igual forma.

Ahora que tenemos una idea de la descomposición y que residuos no son recomendables, podemos empezar el paso a paso para tener nuestro compost casero.

Con lo primero que tenemos que contar es una compostera o trozo de terreno, una tijera de poda o tenazas para triturar los restos, un rastrillo para remover el compost y residuos orgánicos que produzcas en tu hogar.

Paso a paso

1.- Debes preparar y ubicar la compostera o zona donde harás tu pila de compost. Puede ser un cubo o una caja de madera con ventilación.

2.- Separa tus residuos orgánicos entre húmedos y secos. Los primeros son restos de frutas, vegetales, restos verdes de poda, etc; y los segundos son sin humedad tales como ramas u hojas secas.

3.- Forma una base o lecho con los materiales más leñosos como piñas, ramas o poda de arbustos duros. Con esto se facilitará el aireamiento del compost, lo cual es vital para su producción adecuada.

4.- Agrega una primera capa de residuos secos triturados por las tijeras. De aquí en adelante irás alternando las capas de residuos húmedos y secos con el fin de conseguir el compost rápido o a la mayor velocidad posible.

5.- Riega un poco los residuos orgánicos pero sin llegar a generar un charco, sólo lo suficiente para que la humedad penetre entre los diferentes puntos del contenedor. Además de regar, deberás remover el compost cada dos semanas.
En caso de percibir malos olores, puede deberse a que has añadido residuos que no corresponden o hay un excesivo nivel de humedad. En este último caso, agrega más residuos secos y remueve.

Una forma de saber si está bien la humedad es tomar el material con tu mano y apretarlo, esta se debe amoldar. Si se derrama está muy seco y deberás agregar residuos húmedos. Y si gotea, es que está muy mojado y deberás colocar residuos secos.

De solucionarse, no tendrás malos olores ni plagas, como mucho moscas de la fruta que de hecho ayudan al proceso.

Con todo lo anterior, lo primero que te preguntarás es en cuánto tiempo tendrás tu compost. La primera vez puede tardar cerca de 9 meses, pero ya más adelante te demorarás de 2 a 3 meses.
Anterior Siguiente